viernes, 29 de marzo de 2013



Ella tiene eso.
Pero la otra ella tendrá algo valioso también
aunque ni la una ni la otra lo podrán controlar.

Por eso es mío.


En el espejo negro las estrellas se iluminan y danzan en torno a Ella.

Lleno de vida, ahora


Lleno de vida ahora, compacto, visible.
Yo, cuarenta años vividos, el año ochenta y tres de los Estados.
Al hombre que viva a un siglo de aquí, o dentro de cualquier número de centurias.
A ti, que no has nacido aún, te dirijo estos cantos.
Cuando leas esto, yo que ahora soy visible, me habré vuelto invisible.
Entonces tú serás compacto, visible, y realizarás mis poemas, volviéndote hacia mí
imaginando cuán dichoso sería yo si pudiese estar contigo y ser tu camarada:
haz como si estuviera contigo (no lo dudes mucho, porque estoy ahora contigo).


WALT WHITMAN

miércoles, 6 de marzo de 2013


Después empezó a sonreír, a sonreír de verdad. Miró, sin sin fijarse en él, a las sombras congregadas y estas retrocedieron como si estuviesen ante un viento fuerte. El chico se quedó boquiabierto.
-¿Me ves ahora?- preguntó Julia.
Asintió mientras la miraba con los ojos desorbitados. 
Ahora era algo diferente, algo que ya no era humano. ¿Un espíritu? Antes era bella, sin embargo ahora era espléndida. 
-Hija mía- dijo la Diosa- Ya estás a salvo. Ya ha pasado todo.
Julia asintió y alzó la vista para mirarla, mientras las lágrimas cubrían su rostro.

No pienso...


Había llegado el momento del duelo interno de Julia, y la dejaron, lo cual fue otro regalo. Lloró por su vida perdida y lloró por la maga que nunca sería. Enterró a esa poderosa hechicera con todos los honores. Y con el dolor, sin quererlo, llegó el alivio. Se había esforzado durante tanto tiempo en ser algo que el mundo no quería que fuese... Ahora podía tirar la toalla. El mundo había ganado. Se entregó a los abrazos de la familia y los agradeció. ¿Qué tenía de especial la magia comparada con el amor? En serio, ¿qué?

...tirar la toalla.